
¿Quién mezcla medidas comerciales excesivamente agresivas con un plan económico deficiente? Donald Trump. O, como me gusta llamarlo, el Gorbachov de EUA.
Esto es lo que está ocurriendo:
Los envíos de carga desde China se han desplomado, y los desabastecimientos comenzarán en un mes más o menos. Trump está ansioso por inyectar un billón de dólares en nuevo gasto deficitario, aumentando los costos de capital. Los “recortes” fiscales que implementó el “genio” Elon Musk, no lograron compensar el gasto y han tenido el efecto contrario. La confianza del consumidor está en su nivel más bajo desde la crisis del 2008.
Hay problemas en la construcción debido al déficit de trabajadores y al aumento en los precios de materiales. Los nuevos aranceles están ahogando el crecimiento en múltiples sectores. La confusión política ha paralizado las inversiones. Y el panorama demográfico global no pinta nada mejor.
La recesión que enfrenta EUA ya es inevitable.
Las decisiones políticas nos llevaron aquí, no los fundamentos económicos. Incluso si se retractará la administración Trump hoy mismo, la recuperación tardaría meses.